¿Por qué hiciste todo este desastre?
Oh, Dios.
Quisiste escapar de ti, te hartaste. Creaste un mundo lleno de desgracias.
La felicidad no existe, es simplemente una creación para escapar de tus problemas.
Dios está muerto.
Es una falsa esperanza, creen que pueden ser hipócritas en este mundo y que todo será perdonado después de su muerte.
¿Y que más se puede esperar? Si el mismo gobierno y sociedad obliga a prostituir la juventud.
Dime cuanto vales.
Nada tienes, nada vales.
¿Entonces eso es lo que vale la tierra?
Por que acá hay que ver y tolerar.
Hay que escuchar y callar.
Solo hace falta atacar algo simple de una sociedad para que todos se sientan ofendidos, muchos lo llaman cultura.
Lo único que tienes es tu cuerpo.
El en sí mismo.
¿El alma?
Es simplemente una virtud del cuerpo, otros la llaman razón.
¿Y para qué la necesitas? Si solo piensas en ti. Y llega el punto que te empiezas a saturar de ti mismo, y te sorprende…
Dale a cualquier cosa un mínimo de consciencia y verás como llora el resto de su vida.
¿Perfecto? No, no lo es.
Vuelve cuando estés triste y recuérdame lo ingrato que soy porque lo necesito.
Si no fuera por tus problemas, tú y yo no tendríamos nada que ver.
La vida no vale nada si no es para perecer.
No podemos buscar el error si somos nosotros.
¿Por qué siempre te intentas poner en el papel de héroe?
¿Arte? No te mates solo.
He hablado con más de medio planeta y sigo sin encontrar la cura contra el amor.
¿Quieres dejar algo con la esperanza de encontrar exactamente lo mismo?
No sabes amar y te desespera el hecho de que nadie lo haga.
Los que aman la vida no la aman porque están acostumbrados a vivir, la aman porque están acostumbrados a amar.
Los que viven en la montaña, miran su panorama desde lo más alto y ríen y se regocijan de todas las tragedias de las del teatro y las de la vida.
La vida es difícil de llevar, más ¿Para que tendrías tu orgullo por la mañana y la resignación por la tarde?
La vida es difícil de llevar.
Dios está muerto.
Y no hay nadie más para salvarnos.
Yo no creería más que en un Dios que supiese bailar.
Y cuando vi a mi demonio, lo encontré serio.
Él hace caer a todas las cosas, no con la cólera, sino con la risas que mata.
Adelante, matemos el espíritu de un Dios.
Desde que aprendí a volar, no quiero que nadie me empuje para que me mueva.
Ahora soy ligero, vuelo, ahora me veo a mi mismo por debajo de mi.
Ahora un Dios baila por medio de mi.
Hombres extraviados, buscando una luz en el mar negro y endeble, en el cual surfean sueños en el vacío, carnes ausentes y precarias.
No hay nada más hermoso que vivir un recuerdo, aunque ese precisamente les haga sollozar. Pues más triste es la vida mía que al llegar la noche ni lloro un sueño herido, ni tengo en quién pensar.
Con esto me despido para nunca más volver, y les agradezco todos los años que me brindaron con su ausente amor. Fueron años de quejas, que posiblemente hayan sido en vano. Yo amo a los que escriben con sangre propia, porque la sangre es espíritu, y los que escriben con sangre no quieren ser leídos, quieren ser aprendidos…
Y si nada les quedó de todos estos años, solo traten de aprender esto:
Siempre hay algo de demencia en el amor, pero siempre también hay algo de razón en la demencia.
Muchas gracias por brindarme todos estos años su atención, y que la fuerza los siga acompañando por todo la eternidad, porque yo tendré que perecer, para nunca más volver.
¡Gracias por todo!
Emmanuel Aristizabal - Abril 02-2020
- Exalumno 2019